Nacido en Barbarano Vicentino, se hizo monje camaldolita y en 1647 fue designado maestro di cappella de la catedral de Viterbo. Se supone que falleció en Roma a los 75 años de edad.

Su reputación se debe en gran medida a Florido de Silvestris, él mismo nativo de Barbarano, quien publicó las “Sacrae musicales cantiones 8 vocibus et pro processionibus de Vannini” (Roma, 1666) póstumamente, fuera del local patriotismo.

En su prefacio, Silvestris parece recomendar el volumen con fines didácticos más que por su valor musical. Incluyó una pieza de Vannini.